Este año he decidido jugar a ser la excepción y tengo que apechugar con mi decisión. No es fácil compaginar una oposición donde cada minuto cuenta con las competiciones pero es lo que me hace feliz y una persona feliz es capaz de cualquier cosa. Tampoco es fácil llegar a un campeonato de Andalucía pensando que has entrenado bien y que te lleves más tortas que en toda tu vida.

Estamos en Febrero. No tengo tiempo ni para rendirme ni para llorar ni quejarme. Toca levantarse y seguir entrenando porque es más fácil hacer 10 carreras mediocres que 1 carrera buena, así que mientras me quede hambre en las piernas seguiré buscandola hasta que salga.

En cuanto a mi carrera: Estuve toda la semana nervioso de más y con 0 confianza en mi mismo, cosa que fue un gran error pero es como me sentía a pesar de que los números entrenando estaban saliendo y las sensaciones también. No supe remediarlo.

Hasta que no me metí en el corralito de salida no me quité los nervios y me dije: "Va, lo que tenga que ser, será". Cuenta atrás y a correr. Mi planteamiento de carrera era salir guardando hasta el km 16 y después en el km 16 atacar con lo que me quedase. Salí muy atrás. Las sensaciones no eran buenas de salida pero conforme iban pasando los km me iba encontrando mejor y cogiendo a gente. Ahora, estoy gratamente sorprendido con la sangre fría que tuve haciendo mi carrera justo como la había planteado. Incluso después de ver a mis padres en km 5 no se me calentó el morro y seguí haciendo lo que tenía planeado.

Seguí a lo mío mientras comía y bebía constantemente, cosa que en otras carreras no había cuidado. La verdad es que iba super concentrado en hacer lo que tenia que hacer y se me pasaron los kms hasta el el comienzo de los morrones (km16) rapidisimo. Por fin llegamos a los morrones y yo me veia con ganas y fuerzas para meter una marcha más. Empecé a subir y me di cuenta de que no tenía fuerzas para dar más. No sé si fue cansancio de la semana o la poca confianza que llevaba o que realmente no iba tan guardando como pensaba. Sea como sea no me vine abajo. Agaché la cabeza y tiré de orgullo y amor propio para subir los tres morrones. Poco más tengo que contar de esta parte puesto que solo iba pendiente de poner un pie detrás de otro tanto subiendo como bajando, quien haya corrido Sierra Elvira sabe de lo que hablo. Perdí el cuarto puesto de mi categoría a solo 3 km de meta pero es que tampoco tenia más fuerza para responderle. Esto tampoco es importante en realidad, yo esta mañana me he tenido que levantar a estudiar e ir a clase igualmente.

Terminé la carrera y me puse malo. La cabeza me iba a estallar del solazo que pillé subiendo el segundo morrón y tenía ganas de vomitar. Que bestia. Es lo más duro que he hecho nunca. Durísimo. Ni en Jarapalos sufrí tantísimo. La verdad es que ayer estaba un poco decepcionado porque pensaba que iba a rendir algo más ya que había entrenado más que nunca. Hoy, en cambio, estoy muy contento. En realidad, llevo corriendo 7 semanas, no podía pedir más. Estoy contento por conseguir una cosa que nunca había hecho, que es hacer una carrera consistente de principio a fin, sin altibajos ni reventones, siendo muy constante. Esto último lo he visto reflejado en los números que los he mejorado casi todos. También estoy muy contento por la gestión que hice de la carrera.

De piernas no me encuentro mal y mi cabeza está ya pensando en este domingo que nos vamos a Borriol a correr por primera vez una Copa de España, donde si ayer me llevé tortas...aqui me las voy a llevar por tres. Toca seguir trabajando.

Gracias a mi club, Cuellar Stone Running por todas las facilidades que me están dando y a mis padres por el madrugón. También a la organización de la carrera por hacer cada año una de las mejores carreras de Andalucía.

Track de Strava: https://www.strava.com/activities/2171756813